Todos los días podemos hacer algo que nos ayude a vivir mejor: cuidar el cuerpo y la salud, organizar mejor nuestro tiempo, estar más felices en el trabajo y con nuestros hijos, tener la casa más ordenada...


sábado, 25 de abril de 2009

La importancia del cuidarse a uno mismo

Quizás cuando uno piensa en cuidado personal se imagina ir a la peluquería, hacerse las manos, los pies o un masaje. No despreciemos el valor terapéutico que pueda tener para nosotros, pero ampliemos un poquito más la idea. Menciono algunas cosas que tienen que ver con descuidarnos y a todas nos han pasado:

- sobrecargamos la agenda con más cosas que las que podemos realizar
- nos sentimos en la obligación de ser y estar perfectas (¡qué presión!)
- pedimos menos ayuda que la que deberíamos pedir (tanto familiar como con personal contratado)
- renunciamos a hacer cosas por culpa
- descansamos poco, menos que lo mínimamente necesario

Entonces, el amor y el cuidado que ofrecemos generosamente a los demás no lo estamos extendiendo hacia nosotras mismas. Y hay un dato adicional: si no trabajamos sobre nuestro propio cuidado ¿qué tipo de modelo estamos ofreciendo a nuestros hijos? : uno que no está basado en la autoestima. Cuidarnos tiene una enorme importancia porque es aquello que funciona como nuestra reserva de energía para hacer todo lo que hacemos, nos hace vivir en calma y ser más efectivas. Y, fundamentalmente, nos hace sentir bien por dentro y por fuera.

Aquí algunos ejemplos simples sobre cómo podemos cuidarnos y al mismo tiempo renovarnos:

Cuidado físico
- Comer de manera saludable, tomando mucha agua y descansando
- Hacer actividad física todos los días, aunque sea por un período de tiempo breve
- Dedicar tiempo a nuestro cuerpo: desde la consulta médica hasta la peluquería, el kinesiólogo o aquello que nos haga sentir bien.

Cuidado emocional/espiritual
- Reunirse con amigos y mentores profesionales
- Buscar ayuda profesional en distintos tipos de terapia
- Escribir acerca de nuestros pensamientos y sentimientos
- Salir con amigas o en pareja. Salir sola tiene su encanto también, eh!
- Caminar en la naturaleza.
- Hacer algo creativo: pintar, dibujar, escribir, bailar, cantar
- Hacer un trabajo voluntario para una causa que nos motive.

Cuidado mental
- Estudiar algo que nos estimule intelectualmente (en mi caso, me estoy aplicando al alemán)
- Aprender una destreza nueva, como tejer

En la próxima entrada sobre este tema propondré un ejercicio práctico. Hasta la próxima.